jueves, 31 de julio de 2008

Segunda sesión: Peter Weir

He estado durante esta semana pensando en esta segunda sesion de la cinematema y estaba casi convencido de hacer un nuevo programa sobre el verano, que al final hare, pero el otro dia vi terminar, porque ya la habia visto, Master and Commander, y di un vuelco en mi decision y aqui esta el resultado: un programa triple sobre Peter Weir. El director australiano es uno de esos que no destacan pero que despues de unos años han realizado una carrera mas que interesante. Yo le ubicaria entre ciineatas como Robert Benton o Sidney Pollack. Pelicula a pelicula se nota que todas tienen una misma fibra optica. Lo malo de estas peliculas es que las hemos visto bastante y lo bueno es que nunca te cansas de hacerlo. Por eso vamos a programar tres peliculas pero con varias propina. Y lo magnanimo de la oferta responde a que Peter Weir No es un cineasta prolifico y en una sentada, o en dos, se ve la perspectiva del australiano.
Gallipolli. Se trata de la primera pelicla que le situa dentro del panorama cinematgrafico mundial, despues de ser conocido en Australia. Y precisamente lo hace con un episodio negro en la historia de Australia, la Batalla de Gallipoli. Un Mel Gibson, estrella emergente, en completo estado de gracia y un gran pulso dramatico hacen que esta eli sea una marca de la casa Weir, interesante, entretenida y tecnicamente de gran calidad.
Sin miedo a la vida (fearless). No entra dentro de su poker de peliculas pero gracias a un Jeff Bridges increíble, esta cinta se convierte en otro gran atractivo para disfrutar en la supertele de plasma de casa. Y la premisa: un hombre le cambia la personalidad cuando salva milagrosamente la vida en un accidente aereo.
Master and Comander.De momento es la última pelicula del australiano y también de momento, es su total consagracion como director ya que con esta película condensa lo mejor de su cne que ha ido mostrando gota a gota en sus diferentes filmes. A saber: Entretenido y por lo tanto comercial, guiones con "chicha" y una calidad técnica envidiable. Aparentemente , esta historia no cuenta nada, ya que entra en el barco que dirige Russell Crowe, suceden varias cosas y cuando van a ocurrir otras mas decide salir del barco y concluye la pelicula.Es de una maestría envidiable y disfrutas de la aventura como un autentico enano y con unas ganas enormes de que el Capitán Jack Aubrey te de ordenes...en fin una gozada.
Y si algunas, o todas, de estas pelis las hemos visto podemos seguir o empezar con El año que vivimos peligrosamente, Unico Testigo, El club de los poetas muertos, Matrimonio de conveniencia y el Show de Truman. Yo creo que con esto hay para disfrutar desde casa y para que los amigos y familiares te echen de menos. Saludos de las antípodas. Jöel.

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