viernes, 19 de febrero de 2010

La cinematema. Cuarta sesión. Cine Inmobiliario.

Es viernes y me parece un día inmejorable para retomar una sección interesante de este blog maltrecho pero longevo. La cinematema nació con la idea de dar un abanico de tres películas unidas por un hilo temático. Ya hemos pasado por el verano, el cine musical, sobre el que algún día habrá que volver, y sobre la mirada de Peter Weir. El hilo de hoy es el cine inmobiliario. Reconozco que la percha es un poco débil pero resulta que he conseguido armar un programa triple muy interesante con el inmueble como elemento central. Para este fin de semana que aún se antoja frío y desapacible, propongo visitar tres casas. Un espacio pequeño, urbanita e ideal para robinsones buscando huellas en la arena, una casa luminosa y en fase de construcción pero con mucha vida acumulada y un piso grande, perfecto para empezar una nueva vida pero en la que no entra más que un sueño.
‘El apartamento’. B. Wilder. 1960. Poco se puede decir de una de las mejores comedias de Wilder y por extensión, una de las mejores películas de la historia del cine. Esta cinta cuenta la historia de C.C. Baxter, un trabajador cualquiera de una gran compañía que por azar se ve obligado a dejar su piso de soltero a sus superiores para sus escarceos amorosos. Este negocio paralelo va 'relativamente bien' hasta que entra en juego Fran Kubelik, la ascensorista de la que está enamorado. Una comedia romántica pero que contiene esa mirada oblicua y triste del director austríaco. Un guión sólido donde los haya con perlas como "cuando estás enamorada de un hombre casado no tienes que llevar rimel", frase que mezcla el humor, el amor y el desencanto a partes iguales en un cóctel que se llama 'El Apartamento' y que ganó cinco oscars.
‘La casa de mi vida’. I.Winkler. 2001.
Quizás pasada demasiadas veces por la televisión, 'La casa de mi vida' es, sin embargo, una película muy bien dirigida y muy efectiva en cuanto que consigue su propósito. George Monroe tiene los días contados, le han echado de su trabajo de maquetista y vive en el garaje. Llega el verano y decide tirar su antigua casa y leantar una nueva. Para ello obliga a su hijo adolescente a que le ayude. Se trata de un melodrama clásico con final trágico y aleccionador pero que utiliza todos los elementos a su alcance con maestría y contención. Con una metáfora más teatral que cinematográfica (me estoy acordando de 'La boda de los pequeños burgueses' en la que Bretch lo utilizaba pero en sentido inverso), Winkler no fuerza a los personajes a cambiar radicalmente sino que todos van encontrando su camino poco a poco sin estridencias y mecidos por una excelente fotografía del oscarizado Vilmos Zsigsmond y música de Mark Isham. El pulso de Winkler evita que esta película se convierta en un telefilme barato.
‘Casa de arena y niebla’. V. Perelman. 2003. Y para terminar este programa triple inmobiliario tenemos un argumento que también podría haber servido para llenar las sobremesas televisivas pero que, afortunadamente, se ha convertido en una película profunda que se basa en un conflicto inmobiliario para hablar de los sueños, las oportunidades y el pasado. Un bungalow en California enfrenta a Kathy, una joven que pretende encontrar el norte después del infierno de las drogas y Massoud Amir, un ex-militar iraní que pretende dar a su familia el lujo perdido.
Una cinta a veces densa, como la niebla, e incómoda, como la arena que en su ritmo, pausado y contenido, y en sus interpretaciones, sólidas y profundas, basa su éxito. Fue la 'tapada' en los oscar de 2004, con tres nominaciones.
Y así, ponemos punto final a este menú más parecido a unos anuncios clasificados del periódico que a un programa de cine pero que respira celuloide y calidad por los cuatro costados. Desde luego que no son las únicas de este tema, así que espero sugerencias.
Un abrazo sin hipoteca pero amueblado. Jöel.

1 comentario:

David dijo...

No he visto la tercera de tu programación. Pero sobre El apartamento. Vale ya de definirlo como una comedia. Eso no es una comedia. http://safarinocturno.blogspot.com/2009/12/un-clasico-de-la-comedia.html
De hecho, la siguiente película era casi más cómica (pero no me gustó tanto como a ti, por lo visto).
Un post muy majo, por cierto.
Iré revisando viejas entradas de tu(s) blog.

Un abrazo.

PD: Si puedes quita de mi anterior comentario lo del mail y con que "edites" este y quites la PD, asunto arreglado.